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Thursday, November 07, 2019

Como salir de los defectos


Un gran pensador afirmaba que el primer y fundamental paso que había para buscar cambiar un defecto de carácter era el reconocerlo. ¿Y que es un defecto de carácter?  se pregunta el discípulo, mas que sencillo responde su maestro, es el antiguo termino pecado que pesa tanto sobre los hombros en el que el incurre y del que, aunque así se señale, no es necesariamente el mejor camino para no cometerlo.




¿Por dónde empezamos entonces? Pues hagámoslo primero por citar los denominados Siete pecados capitales lujuria, ira, soberbia, envidia, avaricia, pereza, gula, plato preferido en las confesiones. Son de buen tamaño, verdad ¿Claro, puesto que ellos están directamente relacionados con lo que adquirimos durante nuestro crecimiento en edad y los que nos reducen la capacidad de alcanzar la madurez emocional.






Al reconocer entonces nuestras deficiencias de carácter estaremos dando un paso gigantesco para su solución, para lo cual será necesaria, no solo una contrición de corazón sino también un propósito de la enmienda, como lo definiera Gaspar Astete, enmienda que deberá ser , no solo hacia nuestro comportamiento equivocado, sino también en referencia a los que de él por rebote resulten afectados.



¿Y de ahí que seguirá? Pues algo importantísimo: el deseo de querer cambiar y la voluntad de pedir ayuda cuando el compartir sea básico para la solución. Acordémonos que un defecto de carácter no aliviado por medio de un compartir, si no se le busca y encuentra solución, será como una olla a presión plena de frijoles a la que si no se le abre su valvulita para que escape el calor, simplemente explotara, tal y como sucede con los remordimientos y continua incurrencia en los defectos de carácter de los seres humanos.


11 comments:

Macondo said...

Saber bajarnos de nuestro burro particular para prestar oídos a quienes —con una objetividad que nosotros no tenemos para esa cuestión o problema— nos están aconsejando lo evidente. Es el primer paso, pero el más difícil de dar.
Un abrazo.

Susana said...

La contricción es lo más difícil. Un beso

Sandra Figueroa said...

Difícil reconocer nuestros defectos pero no imposible. Y todos tenemos defectos. Amigo Ricardo que buen post para reflexionar en querer cambiar...... Saludos a la distancia mi fiel amigo. Cuídate mucho y gracias por estar siempre.

CHARO said...

Generalmente todos sabemos de que pie cojeamos ( hay excepciones) y generalmente queremos cambiar en aquello que sabemos hacemos mal y auque lo logramos por un tiempo también es verdad que volvemos a caer y entonces viene la decepción y los remordimientos. Es dificil lograr ese cambio deseado pero hay que intentarlo siempre y si caemos volvernos a levantar.Saludos

Jose Ramon Santana Vazquez said...

gran razon lleva Astete cuando lo mas complicado es reconocerlos y hacerse proposito de la enmienda superarlos casi siempre son como la olla Ricardo que explotan y dan mas abatimiento en los recuerdos , estupenda reflexion mis saludos y un fuerte abrazo espero que lo de Zidane sea transitorio . jr.

AMALIA said...

Reconociendo nuestros defectos, podremos intentar mejorar.
Hay que intentarlo.
Un abrazo.

carlos caggiani said...

Querido amigo... sin lugar a dudas el aceptar cualquier defecto ayuda a poder mejorar nuestra vida.
Yo creo que los defectos y la misma manera de ser, se van adquiriendo y son muy dados al entorno en que nos criamos. Por eso una buena guía de los padres y los maestros son importantes para evitarlos y evitarnos problemas futuros.
Un abrazo

esteban lob said...

Y yo que creía que la Pereza...era la esposa del señor Pérez. Lo digo sin ira ni soberbia,
tampoco de envidia, pero mi avaricia no permitió que yo entrara a algún restorán donde se escenificaría algún acto de lujuria.

Manuela Fernández said...

Como mencionas lo primero es reconocer el defecto, eso ya es problema y segundo querer cambiar, eso es más problema todavía. La humildad ayuda a llevar a cabo estos dos pasos.
BEsis.

Recomenzar said...

Interesante tu entrada Te he pedido como amigo en FB aun no tengo respuesta un abrazo

Marina Filgueira said...

Creo haber dejado a qui un comentario... ¡No sé, igual me equivoco! Bueno pues atendiendo a tus reflexiones, pienso que todos somos pecadores alguna vez, sin ser envidioso ni lujurioso ni otra casa, no creo que haya quien tire la primera piedra. La perfección no existe. Sólo Jesús fue perfecto. Felicidades por el texto, es una lección de vida.

Lo que debemos hacer es examen de conciencia, contrición de corazón y propósito de enmienda


Te dejo mi gratitud por tu buen hacer.
Lo que debemos hacer es examen de conciencia, contrición de corazón y propósito de enmienda

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