Y ahora…. El viejo Rafa Infante

En estos últimos días parece que se han agitado bastante las aguas del más allá llevándose a amigos bien queridos para el otro lado del charco. Esta vez le tocó el turno a nuestro, y digo nuestro, pues muchos lo queríamos, el incomparable Rafael Infante Méndez. “Rafa”, como le decíamos en todas partes, quien al partir deja sola a Rosita, su abnegada esposa, a su hija Evelyn, a su yerno, y su adorado nieto Gaspar, el cual le había generado el que yo lo denominara en uno de mis escritos como “El abuelazo”, articulo que publique en Octubre 14 del 2012.

En tal documente decía yo lo siguiente, a raíz de la partida de su cercano amigo León Londoño, gran dirigente del Futbol colombiano “Londoño Tamayo ha dejado sin “compinche” de traguitos a mi querido “Rafa” y este, quien tanto lo apreciaba, deberá por tanto destinar más tiempo a su único nieto que le dio origen a su denominación de “El abuelazo” y entonces, cuando vaya a Bogotá, le tocará buscar a ver con quien poder empacarse sus “anetoles” en el Restaurante Salinas del Norte, lugar adonde se reunía siempre con su gran amigo León”. Hoy, para gozo de ambos, se han encontrado en el cielo estos dos grandes personajes.

Su querida esposa Rosita me regaló después de su fallecimiento este magnífico relato : “Rafa fue agrónomo en la zona bananera, tuvo un farmacia con su tío, el Doctor Julio Méndez Barreneche, trabajó como Gerente de Carga de Aerocóndor, Presidente de HTM Import and Export Company, y fue Gobernador del Magdalena en la administración del Presidente Cesar Gaviria, El Presidente Ernesto Samper lo nombró Cónsul General de Colombia en Miami, y Director Adjunto de Proexport. Rafa consiguió que la Familia Barreneche donara la Espada histórica de los Barreneche a la Nación y, en una ceremonia en San Pedro Alejandrino, con la asistencia del Presidente Cesar Gaviria, fue presentada la espada en la presencia de muchos Barreneche, Méndez Barreneche, Delgado Barreneche, y López Michelsen Barreneche. Rafael Infante estaba feliz porque fue puesta la espada al lado del Altar de La Patria. En la reunión también estaba el Presidente Alfonso López Michelsen cuya madre era Michelsen Barreneche. Hace poco, antes de morir, fue a la Quinta de San Pedro Alejandrino en Santa Marta y le dijeron que la espada había desaparecido. Les preguntó a unos que trabajaban allí que había pasado con ella y no le supieron dar razón. Rafa no tuvo tiempo para investigar porque luego murió, pero estaba muy mortificado y esperaba que alguien del alto gobierno ayudara a rescatarla”.

Rafa fue un hombre que amo con pasión a su partido, el liberal y quien respiraba “samperismo” por todos sus poros. Rafa fue intenso, fogoso, irreverente, súper activo, y aunque era así, se hacía querer, y mucho de los demás, cual ningún otro. Me acuerdo una vez que lo lleve casi que a la brava a misa, pues eso poco le gustaba, y cuando vio el servicio se entusiasmó tanto que en medio de la homilía del cura lo interrumpió para decir algo al respecto. Nadie protestó, y por el contrario su intervenir deleitó, tanto al prelado, como a los asistentes. Genio y figura hasta la sepultura, pero así se hacía querer de quienes lo conocíamos pues, además de ser tan simpático y entrador, era un devoto a servir a los demás. Buen viaje, querido Rafa, y aquí continuaremos recordando ese gran legado de amistad y servicio con el que nos engalanaste.

Los Servicios funebres para Rafael Infante serán en Stanfill Funeral Home, 10545 S. Dixie Highway de Miami el miercoles , Febrero 25 de 3:00 pm a 5:30 pm.