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Friday, May 10, 2019

Tortura de soledad y miedo


No se sabe que resulta menos agradable si la soledad o el miedo, aunque en buen numero de oportunidad van juntas y muy agarradas de la mano. Son estados emocionales que algunos critican sin piedad por que quizás no los han sentido tan intensamente como sucede con otros, los que viven su existencia en océanos de tristeza y de tragedia.



Resulta bueno aclarar que en la soledad no resulta lo mismo el estar solo como el sentirse solo. El estar solo es un estado de ubicación y el sentirse solo es una emoción negativa derivada de las creencias y acciones de cada cual. De ahí que hay personas que, aunque estén en un salón inmenso rodeados de mucha gente, inexplicablemente se sientan solas, mientras que otras que, estando solas, no se sientan así y por el contrario, a diferencia del anterior,  se sientan como un Pasha.






Te veo venir soledad, como lo dice la bella canción, no hay que asociarlo a nada diferente al miedo de estar solos, esto es el temor al abandono en el cual, si aceptamos las cosas de la vida tal y como ellas se presentan, llevaran estos miedos a su justa proporción de ser, la que en un numero grande de casos apenas es una creencia equivocada.


11 comments:

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche said...

Claro, Ricardo, todo depende del estado emocional... no es la soledad la que duele, es la ingratitud.

Un abrazo.

Susana said...

La soledad ha sido mi amiga. Un saludo

Bienaventurada said...

Debemos aprovechar los momentos de soledad para reflexionar y buscar a Dios, a veces el estar solos es provechoso si lo sabemos manejar. Un abrazo.

Ligia said...

Es cierto que se puede "estar solo" aunque rodeado de gente... Es un sentimiento. Abrazos

Jose Ramon Santana Vazquez said...

miedo al miedo Ricardo esturpenda reflexion nos traes sobre estar solo y la soledad ambas parecen lo mismo pero no lo son pues como bien dices uno es un estado emoccional y mas duradero y la otra es si bien pasajero tambien da sus miedos , enhorabuena recibe mis saludos y un fuerte abrazo . jr.

esteban lob said...

Certera reflexión, Ricardo, que acredita al fin y al cabo nuestra fragilidad.

Abrazo austral.

Marina Filgueira said...

¡La Soledad, amigo Ricardo! No puede ser agradable si es impuesta, pero cuando la eliges tú, es interesante y hasta fantástica.

Y es verdad que hay personas mayores que viven en su casa rodeada de gente, pero se sienten solas, todo depende de la comunicación con los mayores que vamos siendo muchos; la mayoría de la gente joven no presta atención a su abuelo/la.
En mi niñez y juventud, el abuelo era agrado se le veneraba con amor y respeto, eran la escuela de la vida si pisar la universidad.

Es un tema que da para mucho debate, podría seguir escribiendo un folio entero, pero tengo que dejarlo que voy a salir.
Te dejo un abrazo y mi gratitud.
Se muy, muy feliz.

Amalia said...

Una gran reflexión.
Y muy certera.
Un abrazo.
Feliz semana.

Juan Ramón said...

Exacto, la creencia equivocada de no poder sobrevivir sin la aceptación y la compañía de los demás. Claro que en tiempos anteriores eso fue muy real, sin el "arrope" de la tribu, la gente moría sin remedio

Claudia H said...

Buenos días, esta reflexión está excelente. Es muy diferente cuando te quedas sólo porque los demás se alejan de ti y no lo asumes con madurez, pero cuando decides quedarte solo más no solitario para tener paz, tranquilidad y armonía en tu vida...eso no tiene precio. Muchas gracias Ricardo, un abrazo.

CRISTINA said...

Ricardo, muy buena entrada, para una buena reflexión. La Soledad si es elegida es fantástica, pero luego esta esa otra soledad que tantas persona padece que es impuesta y esa ya no es tan fantástica. Si trazamos un mapa de sentimientos y situaciones, nos daríamos cuenta de que para muchas personas la soledad y la tristeza están muy cerca. Esta proximidad no solamente se relaciona con la soledad en primera persona, sino que el sentimiento de pena por alguien que percibimos como aislado también es habitual.
Un abrazo.

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