Vanidad…ese es el pecado preferido del maligno cuando, al final de la película “El abogado del diablo “Al Pacino, su protagonista, tienta una vez más a su víctima, quien había logrado salir de sus cadenas más el que luego, con la tentación del prestigio vuelve a ponerse en manos de aquel que lo había llevado hasta la peor de las situaciones.
Si. Estoy de acuerdo en que tanto la Soberbia, el Orgullo y
la Vanidad, han sido grandes fallas en el hombre, mas ahora quisiera agregar
una cual es la Codicia, falla que azota inclementemente a la humanidad por
siempre, pero la que hoy, debido a las comunicaciones, entre ellas las del
rápido internet, se muestra con claridad como un mal que afecta sin piedad a
muchas naciones.
A la gente le ha parecido hasta ahora muy seguro el “esconder
“ sus dineros en los paraísos fiscales, que parece ser que no lo son tanto, ya
que hoy en día, a través de escándalos como los de Odebrecht y el de “ Los
Papeles del Paraíso “, vincula sin sonroja ninguna a grandes figuras mundiales
incluyendo gobernantes, empresarios, banqueros, artistas y hasta “
chanchulleros “ comunes y silvestres.
Esto anda bien jorobado y lo más grave es que casi todo el
mundo se puede decir está llevando del bulto, con un componente muy grave, que
atenta contra la democracia misma, y esto es que la corruptela ha alcanzado
hasta el mismo pueblo el cual tiene personajes que se dejan sobornar al
momento de votar por míseros “milquis “( Mil quinientos devaluados pesos ) ,
perdiendo así, por un platico de
lentejas, su capacidad para deliberar y escoger a los mejores gobernantes que
tanto necesitan sus regiones.
Ojalá que esos “Paraísos Fiscales “que hoy ya no lo son
tanto pues sus informaciones secretas empiezan a salir a la luz, dejen su malévola
función y que la información que se obtenga de lo que allí se haya invertido
para evadir investigaciones e impuestos, sirva para transformar a este mundo en
algo más honesto, con los principios morales y de ética en un verdadero proceso
de recuperación y de cambios, para bien.
13 comments:
Ojalá, porque resulta muy decepcionante que aquellos que más tienen sean los primeros en querer esconder y ahorrarse en contribuir al desarrollo de su país. Siempre me parece muy triste y vergonzoso y espero que algún día se ponga coto a esos paraísos fiscales que tanto dañan a otros.
Abrazos
O dinheiro para a maioria das pessoas es lo mas importante na vida e qto mas tiverem, "mejor".
Gracias por tus palabras y por gostares da música de Edith Piaf.
Abrazo.
Es una gran verdad su reflexión. Vanidad de vanidades y todo vanidad, si no es amar y servir a Dios solamente. Gracias, un fuerte abrazo y unidos en oración.
Mientras más dinero tienen, más defraudadores y corruptos son; y esa enfermedad es mundial. Aquí sucede lo mismo, esconden el dinero en países fiscales los más pudientes, y entre ellos los más sinvergüenzas los políticos, empresarios y banqueros.
Abrazo Ricardo.
TUS DESEOS, POR EL MOMENTO, SON UNA VERDADERA UTOPÍA.
EL DINERO SIEMPRE ACALLARÁ BOCAS Y ENCONTRARÁ CAMINOS PARA INVADIR IMPUESTOS.
ME GUSTARÍA QUE FUESE TODO LO CONTRARIO Y QUE LA HONESTIDAD IMPERASE EN TODOS LOS CORAZONES HUMANOS, SIENTO SER DEMASIADO REALISTA.
DE TODAS FORMAS, LA ESPERANZA ES LO ÚLTIMO QUE SE PIERDE.
CARIÑOS.
KASIOLES
Una vergüenza que quienes velan porque el ciudadano de a pie pague religiosamente sus impuestos sean los primeros en meter la mano en la caja del dinero.
Un abrazo, Ricardo.
¡Hola Ricardo!
Después de leer el comentario de Kasioles, poco me queda por decir. Nos toca vivir en un mundo lleno de basura y muy difícil de limpiar. Los que menos tienen, o tenemos, somos los más dignos y cuerdos, tenemos sensibilidad, sentimientos caridad y, respiramos la basura tan cerca, que nos enferma de verdad. ¡Pero así está este mundo por donde caminamos!
¡¡¡Que tristeza!!! Eh.
Hoy nos dejas un texto digno de un aplauso prolongado, esto no quiere decir que los otros no lo merezcan también.
Te dejo un abrazo y mi gratitud.
Ten un feliz día.
Ah! Gracias por la canción de la calandria. Sabes voy a cambiar el vídeo, por ésta.
Que triste realidad "poderoso caballero es don dinero" y el que más tiene más desea llegando su codicia a límites insospechados.....pobrecillos no se han enterado que no se lo pueden llevar a la tumba y que ésta llegará sin remedio.Los paraísos fiscales deberían de desaparecer y tendrían que hacer devolver el dinero a todos los corruptos y entregarlo para beneficio del pueblo llano.Por último no puedo dejar de decir que los que más ejemplo deberían darnos son los primeros que tienen una conducta vergonzosa y esto se contagia muy rápidamente.Un saludo amigo
Muy interesante y claro en los conceptos vertidos.
SALUDOS CORDIALES
Dra. Amalia i. LATEANO
Os paraísos fiscais são uma vergonha !!
A DEmocracia é mai de fachada do que real, infelizmente.
Adorei esse filme com Al Pacino, um dos maiores actores de sempre.
Querido Ricardo, te abraço com carinho
Y lo malo de ellos, es, que dándose golpes en el pecho, proclaman a los cuatro vientos que son patriotas ejemplares; todo lo contrario, ya que son, por intereses personales, y ansia de dinero, los que menos impuestos pagan, que podían servir para cubrir las necesidades de los más necesitados, que por desgracia son muchos.
Por lo que me alegro mucho, que tras esta documentación que está apareciendo últimamente sobre paraísos fiscales, el peso de la Ley caiga sobre ellos, a ver si de una puñetera vez aprenden, el significado de las palabras humildad y generosidad, y lo llevan a cabo.
Un fuerte abrazo, amigo.
Sábado 18 noviembre 2017
Vi ese film, apreciado Ricardo, actuación magistral de Al Pacino y temor por los medios de los cuales se valen aquellos que lo quieren todo con poco esfuerzo. Siempre escribes temas de reflexión, estoy de acuerdo con tus planteamientos, excepto en aquello del soborno al momento de votar; quizás sea posible que alguien lo intente, otro reciba el dinero; pero, ¿acaso el sufragio no es secreto? Pueden existir personas que reciban los centavos, pero que su voto sea por otro, ¿quién reclamara?
Deseo que goces de excelente salud, bienestar y amor compartido
Cuánto temo a la vanidad, temo que me aleje del suelo que piso y mis ojos vuelen sin ver... Un abrazo Ricardo
Post a Comment